sábado, 20 de febrero de 2016

¿Sería Rajoy líder de la oposición otra vez?

Rajoy irrita a Zarzuela al dar por hechas elecciones anticipadas. Para el PSOE, el presidente del Gobierno en funciones trata al rey “como si fuera un becario”.
EL ACUERDO IMPOSIBLE. Sánchez busca el pacto de investidura mientras Iglesias quiere gobernar. El líder de Podemos quiere ir a la reunión para preguntar al PSOE "qué se está negociando".
¿Un país de tramposos?
Así se explica el líder 'popular' que pide la dimisión de Rajoy: "A lo mejor tiene que dar un paso atrás". El presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo, insta a dimitir al presidente del Gobierno en funciones en una entrevista exclusiva con el diario digital 'iLeón'.
Los empresarios califican de "incomprensible" repetir el 20-D.
Lo que no cuenta Pablo Iglesias: no subirá el IRPF sólo a los 'ricos'. Podemos espera recaudar 10.000 millones más en IRPF: 2.000 millones vendrá de subir tipos por encima de 60.000 euros; el resto llegará por otras vías.
Los Brutos de Génova. Javier Somalo.
Pedro Sánchez se acerca a su pacto con Rivera y da largas a Iglesias. El candidato socialista intensifica su negociación con Ciudadanos con quien esperar cerrar un acuerdo global el "lunes o martes".
España. Rajoy llamará a Sánchez si no gana la investidura para ofrecerle una coalición. El presidente en funciones subraya que si hay nuevas elecciones quiere ser el candidato del PP.
Iglesias rechaza el pacto de investidura de Sánchez:«O gobierno o nada». Cree que si el PSOE se sienta a negociar «indica claramente que ha elegido un gobierno de progreso que mire a la izquierda».
Sánchez negocia solo su investidura e Iglesias quiere un pacto de Gobierno. "Si el PSOE quiere gobernar en solitario, que lo diga. Creo que es una imposibilidad", afirma Iglesias.
El cambio está en el pacto. El objetivo de la negociación política, a diferencia del debate de tertulianos, es conseguir acuerdos para confeccionar un programa de mínimos, no de máximos.
DECIDIDO A SER CANDIDATO EN JUNIO. Rajoy replica al debate externo sobre su continuidad: "¿Y yo por qué me voy a ir?" El presidente del PP afronta una crisis doble, institucional y de futuro de su partido, con una aparente tranquilidad que deja pasmados a sus partidarios y pone de los nervios a los demás.

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